jueves, 6 de noviembre de 2008

¿simple extracción de un coágulo u homicidio de una vida humana inocente?

Uno de los puntos clave de la controversia sobre el aborto es saber cuándo comienza la vida humana.
En sentido meramente biológico, puede decirse que no comienza sino apenas se transmite. Todas las células vivas provienen de otras células vivas. Esa continuidad de vida es el postulado básico de la biología. (1) Pero esa explicación no basta porque también los espermatozoides, los óvulos o cualquier célula del organismo humano son seres vivos.
No se trata de defender apenas la vida. Hasta los animales y las plantas la tienen. Se trata de defender algo intrínsecamente más noble: la vida humana. Y más específicamente, la vida humana inocente e indefensa.
Generalmente, los promotores de la legalización del aborto se empeñan en afirmar que no hay víctimas.
De ahí que sustenten que el producto de la concepción es una simple masa informe de protoplasma. De esa forma, el aborto consistiría en la mera eliminación de un parásito, de un tumor o de un amasijo de carne enquistado en el vientre materno.
¿Una mera célula puede ser considerada un ser humano?
Sí. En las palabras del embriologista Dr. Keith Moore:
"cada uno de nosotros comenzó la vida como una simple célula llamada cigoto"
El óvulo fertilizado o cigoto ¿es sólo un ser humano potencial?No. El cigoto (u óvulo fertilizado) no es un ser humano potencial, sino un ser humano con gran potencial. Podríamos decir que el espermatozoide y el óvulo, antes de su unión, constituyen células con una dignidad especial, porque una vez completada su unión, se transformarán en un ser humano en el pleno sentido del término.

¿Porque?

Nadie puede justificarlo...